La muerte del adolescente revela el tipo de problemáticas que vive la entidad.

El asesinato de Dante Emiliano, de 12 años, que fue baleado por un sujeto en la puerta de la casa de su abuela en el municipio de Paraíso, Tabasco, ha generado la indignación en varios sectores de la esfera pública de México, pero también revela otro tipo de problemáticas que vive la entidad, cuna del actual presidente Andrés Manuel López Obrador, como la ola de violencia que azota el estado donde se han reportado arrestos de integrantes de cárteles de la droga y enfrentamientos entre estos grupos del crimen organizado.

“¡No me quiero morir!”, fue lo que gritó el adolescente que retorcía de dolor luego de recibir tres impactos de bala por parte de un sujeto que escapó del lugar y del cual no ha sido identificado por las autoridades. El video donde el adolescente es auxiliado por ciudadanos fue compartido en redes sociales.

De acuerdo con los reportes policiacos, que cita el periódico El Universal, Dante Emiliano se encontraba en el domicilio de su abuela, ubicado en la calle 8 de octubre del municipio antes mencionado, cuando recibió una llamada que lo hizo salir a la puerta donde fue lesionado.

En un principio se había manejado la versión de que el joven intentó evitar el secuestro de su madre por parte de sujetos armados. Sin embargo, la Fiscalía General del estado de Tabasco confirmó a Infobae México que esta versión queda descartada ya que se pudo corroborar que la madre de Emiliano no se encontraba al momento de la agresión.

El secretario técnico y de Seguimiento Gubernamental de Tabasco, Carlos Castillejos, escribió en cuenta de Twitter que personal de alto nivel de la Fiscalía estatal “sigue varias líneas de investigación. Al terminar las investigaciones se informará debidamente”.

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